El uso de drones de alta tecnología comienza a abrir nuevas posibilidades para la agricultura en Jalisco, al tiempo que responde a la necesidad de optimizar recursos y modernizar prácticas productivas en el sector rural.
Autoridades estatales y del sector agropecuario implementaron un programa que contempla 15 drones especializados para apoyar a productores en diversas tareas del campo. Estos equipos forman parte de una estrategia para mejorar la eficiencia en el uso de insumos como agua, fertilizantes, bioestimulantes y agroquímicos, así como para fortalecer las acciones de prevención y atención en cultivos y ganado.
Los drones están diseñados para operar en zonas de difícil acceso y terrenos irregulares donde la maquinaria tradicional tiene limitaciones. Esto permite realizar labores con mayor precisión, supervisar cultivos desde el aire, identificar enfermedades o plagas de manera temprana y aplicar tratamientos o fertilizaciones de forma más eficiente.
Además de las aplicaciones agrícolas, los aparatos pueden contribuir en actividades pecuarias, como el control sanitario de hatos y la siembra en áreas complicadas, lo que amplía el alcance de su utilidad más allá de la agricultura convencional.
Para garantizar un uso adecuado de la tecnología, personal especializado recibió capacitación específica en el manejo de estos equipos, con el fin de maximizar sus beneficios y reducir riesgos durante su operación.
Productores consultados destacaron que la introducción de estos drones representa un paso hacia la modernización del campo jalisciense, al facilitar labores que antes requerían más tiempo, mayor mano de obra o acceso complicado. Con ello, se espera que los agricultores puedan aumentar la productividad y responder con mayor rapidez a las necesidades de sus cultivos y ganado, impulsando una agricultura más competitiva y sostenible a mediano y largo plazo.






