En un intento por modernizar las leyes civiles y adaptarlas a los nuevos modelos de relación, el Congreso de Jalisco ha puesto sobre la mesa una controvertida iniciativa: matrimonios temporales con vigencia de entre 2 y 5 años, con posibilidad de renovación.
La propuesta, impulsada por el diputado local Enrique Velázquez González, busca ofrecer una alternativa al modelo tradicional del matrimonio indefinido, con el fin de reducir los divorcios conflictivos y sus costos emocionales y legales.
La medida fue presentada ante la Comisión de Puntos Constitucionales del Congreso estatal, donde se discute la posible reforma al Código Civil de Jalisco. El proyecto contempla lo siguiente al término del contrato matrimonial:
Que las parejas decidan si desean renovar su vínculo.
Modificar sus términos.
Disolverlo sin necesidad de acudir a un proceso judicial complejo.
El legislador explicó que la intención no es “banalizar” el matrimonio, sino generar un marco legal más flexible que responda a la realidad social actual. “Lo que buscamos es que las parejas entren al matrimonio con responsabilidad, pero también con la libertad de evaluar su continuidad cada determinado tiempo, sin que eso implique conflictos legales innecesarios”, dijo en conferencia de prensa.
La propuesta está inspirada en legislaciones de países como Alemania donde algunos estados han debatido o implementado acuerdos similares en materia de uniones libres o de hecho.
Como era de esperarse, la iniciativa ha provocado reacciones encontradas. Por un lado, algunos especialistas en derecho familiar consideran que podría aliviar la saturación en los juzgados de lo civil y dar mayor autonomía a las parejas. Por otro, sectores conservadores y religiosos critican la medida por considerar que atenta contra la institución del matrimonio como base de la familia.
La figura del matrimonio temporal incluiría:
Cláusulas preestablecidas que pueden abarcar acuerdos económicos o de vivienda.
Custodia de hijos en caso de disolución y otros aspectos relevantes para la vida en común.
Un margen legal para decidir si continuar con la relación contractual o finalizar el vínculo sin mayores consecuencias.
Según datos del INEGI, en 2023 se registraron más de 160 mil divorcios en México, de los cuales una parte significativa corresponde a matrimonios con menos de cinco años de duración. Dichas cifras refuerzan la postura de los impulsores de la iniciativa, quienes consideran que una estructura legal más dinámica podría ayudar a prevenir rupturas legales prolongadas y costosas.
El debate legislativo apenas comienza, pero la propuesta ya ha logrado abrir un espacio de discusión sobre cómo deben configurarse las relaciones afectivas en una sociedad donde los vínculos son cada vez más diversos y cambiantes.
Mientras tanto, la ciudadanía observa con interés —y algo de escepticismo— una iniciativa que, de aprobarse, podría marcar un precedente a nivel nacional.
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